La ciencia detrás del aislamiento de las bolsas térmicas
Comprender la ciencia del aislamiento con bolsas térmicas puede ayudarle a apreciar cómo estos productos aparentemente simples funcionan de manera tan efectiva.
La mayoría de las bolsas térmicas utilizan materiales con baja conductividad térmica, como aislamiento de espuma.
Esta espuma crea pequeñas bolsas de aire que ralentizan el movimiento del calor, impidiendo que el aire frío del interior escape y que entre el aire caliente del exterior.
Algunas bolsas térmicas más avanzadas incorporan paneles aislados al vacío, que proporcionan una resistencia térmica aún mejor.
El diseño del bolso también importa, con características como costuras selladas y cierres ajustados que ayudan a mantener la temperatura interna.
Al combinar estos principios científicos, las bolsas térmicas crean un microambiente que preserva la temperatura deseada durante un período de tiempo prolongado.